“Bogotá al aire libre”, así se ha denominado el nuevo plan piloto que se implementará en Bogotá para que algunos restaurantes reabran sus puertas y atiendan a los ciudadanos a la mesa. El día del padre fue la primera prueba, en la cual se estudió el comportamiento de la comunidad y propietarios y de allí, se definiría la aplicación de esta iniciativa.
Durante esa primera jornada, participaron cerca de 78 establecimientos comerciales entregando pedidos para llevar y generando ventas por más de 400 millones de pesos. Con este piloto, que toma como referencia reaperturas similares que se han hecho en países como España y Francia, se hará un minucioso análisis para determinar qué tan preparados están los restaurantes en el tema de protocolos de bioseguridad y uso de tecnología.
De acuerdo a lo explicado por Carolina Durán, secretaria de Desarrollo Económico, la iniciativa busca que el espacio público sea habilitado temporalmente, iniciando en sectores como: la avenida 19 de la calle 100 a la 127, la Zona G con Quinta Camacho, Usaquén, Candelaria, la Macarena y el Salitre.
Fuentes: El Tiempo y El Espectador