¡Compromiso para garantizar el cumplimiento de la Normatividad Ambiental!
La Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR), en coordinación con la Policía Nacional, ordenó la suspensión inmediata de las actividades de una curtiembre ubicada en la vereda Chingacío, municipio de Chocontá, tras ser sorprendida en flagrancia vertiendo directamente al río Bogotá aguas residuales provenientes del proceso de curtido sin tratamiento previo y sin permiso ambiental.
La intervención fue liderada por la Unidad Integrada de Gobernabilidad Ambiental (UIGA) de la CAR, que trabaja junto con el equipo técnico de la dirección regional Almeidas y Guatavita y la fuerza pública. Durante la diligencia se encontraron 18 pieles en proceso de curtido y evidencias claras del vertimiento ilegal. Los análisis de laboratorio confirmaron que los contaminantes superaban los límites permitidos por la normativa vigente.
En el sitio también se hallaron pieles en diferentes etapas de procesamiento, maquinaria, insumos y residuos peligrosos dispuestos inadecuadamente en el suelo, incluyendo lodos activados y envases con químicos.
El director general de la CAR, Alfred Ignacio Ballesteros, afirmó que no se cederá en la aplicación de sanciones y multas necesarias para proteger el río Bogotá, uno de los recursos hídricos más importantes de la región.
El informe técnico detalló que la contaminación ha causado impactos significativos en la biodiversidad acuática, con muerte de organismos y alteraciones en la cadena alimentaria, además de afectar la economía local vinculada a la pesca, acuicultura y actividades recreativas. También se advirtió sobre los daños al suelo y los riesgos para la salud humana por la exposición a sustancias tóxicas.
Información de: La CAR.
